La fotografía ha sido desde siempre una gran afición en mi vida. Mis primeros recuerdos con una cámara se remontan a cuando tenía diez años y mi padre me dejaba coger la suya. Me encantaba la sensación de hacer una foto y mirar por la pantalla para ver el resultado.
No es hasta 2013 cuando decido dar el paso y emprender de manera profesional en este mundo. Desde entonces he ido abriéndome hueco mayoritariamente en la fotografía de eventos, congresos, deportes y moda.
Toda esta variedad de retos profesionales me ha aportado y me sigue aportando una experiencia y unos conocimientos sobre la imagen que vuelco en cada nuevo proyecto, buscando siempre el mejor resultado posible.
En esa necesidad de aportar las mejores soluciones a mi trabajo, estoy certificado como piloto de drones y además de estar registrado ante la Agencia Estatal de Seguridad Aérea como operador de drones. Es un paso más hacia delante a la hora de ofrecer el mejor servicio.
Cuando trabajo busco siempre una fotografía natural, espontánea, que refleje un evento dinámico y activo. Me gusta, en la medida de lo posible estar en contacto con el cliente durante el desarrollo de la actividad para poder así cubrir las necesidades o prioridades que vayan surgiendo.
Soy consciente de la dificultad de diseñar, organizar y llevar a buen puerto un evento. Saber ajustarse a una situación e improvisar si es necesario para conseguir los mejores resultados es lo que marca la diferencia.
Mi trabajo me ha llevado a cubrir acciones en parte de la geografía de España y Portugal, además de darme la oportunidad de poder trabajar con clientes como Nestlé, Heineken, viajes el corte inglés, Mediapro, Ikea o la Federación Andaluza y Española de Triatlón entre otras.
A todos ellos les agradezco enormemente su confianza.